Cuando hablamos de procesos cómo la fecundación in vitro la figura de la mujer suele aparecer como protagonista indiscutible. A pesar de ser la mujer quien sufre el desgaste físico-mental en primera instancia, la figura masculina (en el caso de que sea un varón la pareja) es fundamental. Hoy centramos nuestro foco en los hombres aunque cuando una mujer pasa por este tipo de tratamientos el entorno que la rodea (amigos, familiares, pareja…) juegan un papel fundamental en el desarrollo del proceso.
¿Qué puede hacer el hombre durante el proceso FIV?
- Pon el foco en tu relación mientras estéis intentando tener un hijo. Trata de utilizar las actividades ociosas como método de escape de la rutina para que el tratamiento os sea más llevadero.
- Ser muy consciente de que es ella quién está pasando en sus propias carnes por el proceso de reproducción asistida. Ten detalles con ella para hacerle saber qué estás a su lado.
- Ayúdala con el proceso administrativo (concertar las visitas médicas, implícate en cuestiones administrativas con el equipo de la clínica, etc.).
- Ten presente que la vida sexual se va a ver condicionada durante un tratamiento de reproducción asistida.
- Conversar y confiar el uno en el otro os hará más fuertes. Mostrar las expectativas y emociones durante el proceso puede que os una aún más y cuando lleguéis a la meta lo recordaréis con satisfacción.
- Los momentos de silencio, a veces, son necesrios. Si después de varios intentos no conseguís concebir un hijo no hay palabras que valgan. Abraza a tu mujer, apoyaros el uno al otro.
- Si intentas hacerte partícipe del tratamiento y ella dificulta tu tarea consúltalo con el médico.